A B O U T
Partiendo de las posvanguardias como proyecto inconcluso totalmente domesticado y acorderado, de cordero, por el sistema artístico y cultural el artista hoy tiene la posibilidad, la capacidad de leer la historia y trabajar con una lógica consciente del medio en el que se desenvuelve . Está implícito que la creación ética y estética genera diversas manifestaciones discordantes entre sus espectadores las cuales van desde el rechazo y la versión a la aceptación y la reflexión, la censura y la polémica hasta proyectar el proceso mediatizado el cual es hoy el mayor formador de opinión sin criterio, pero sobre todo, el mayor poder del sistema capitalista. Si en los sesenta se decía que el medio es el mensaje hoy podríamos decir que el medio es el poder.
Más que una idea específica me interesa trabajar a partir de un conjunto de inquietudes personales y del imaginario social mediante la tensión entre varias ideas. Desde 2010 que empecé el Bachillerato de artes plásticas he estado interesada en interrogar, revisar, poner en duda, en evidencia los modelos de representación y órdenes disciplinares. No me interesa un medio específico, sino que discurro a partir de lo que más convenga para el trabajo. Por eso durante años vengo realizando dibujos, pinturas, esculturas, grabados y fotografías. Hace muchos años que dejé de pintar porque me quedé en eso, pintando, y estaba hablando de otras cosas que son, entre otras, la Historia de la pintura. En aquella época (2014) pude ver una obra de Piero Manzoni (1933-1963), Inpronta (1962), en la que el artista usaba su huella pero no la representaba. Estaba usando un color, una forma, un trazo, un rastro, algo de carácter deíctico que está ligado puramente a una historia estética. Lo de usar la huella y no representarla es algo que yo siento. En lo que a mis modos de hacer se refiere, al cómo me enfrento a la cosa, la metodología que empleo (entendiendo esta palabra como sinónimo de comportamiento, aquí estaría parafraseando a Xabier Laka) es emprendiendo mi labor desde lo que no se tiene y lo que no se sabe. Como diría ángel Bados el hacer se escapa del saber. Me atraen los misterios indescifrables que rodean y cohabitan con el ser humano. Me acerco a ellos a través de la creación artística. En el taller tomo las decisiones desde el instinto físico, con el cuerpo. Me someto al poder de atracción de las formas, los colores, los materiales y la corporeidad de las cosas con las que trabajo, fijando la atención para poder así atrapar sujetos. De alguna manera esta seducción es algo que despierta algo corpóreo en el otro, en su dimensión más primitiva. Esto causa refinar la sensibilidad, lo que estimula el deseo. El deseo siempre provoca insatisfacción, o ganas de conocer más. Esto es muy bello, ya que es una manera de mantener viva a la vida. A través de mi trabajo por una parte trato de transmitir que la palabra silenciada del Arte actúa a modo de encantamiento donde lo estético reside en el centro mismo de actuar y de hacer presente su función. Cómo afectar al otro diciendo nada. La belleza no pide ser explicada, existe para proporcionarnos placer. Por otro lado pretendo percibir y comunicar la licencia del artista de ejercer in loco parentis lo sensiblemente estético de las prácticas político culturales primitivas. La expresión in loco parentis es una locución latina que se empleaba en derecho romano y quiere decir algo así como "en el lugar de uno de los padres". Entre los recursos plásticos que utilizo busco generar una tensión entre conceptos opuestos, así como volver a repensar orígenes, lugares comunes, como la moral y los buenos principios, el gusto, lo sublime, lo normal y lo correcto, el bien común y la sensibilidad, la belleza y la frialdad, lo raro, loco, obsoleto, el absurdo y la libertad, el azar y la raza, la estética y la ética. No creo tensiones sino que pongo ideas en tensión. Tampoco me considero una profeta que tenga ideas y deba transmitírselas a la gente. No pretendo decir a nadie cómo pensar, el Arte no va de eso, sino que como persona hay cosas que me causan inquietudes, me atraen, y busco ponerlas en tensión para resaltar esas contradicciones en las que vivimos, o simplemente para disfrutarlas. Yo llamo a eso Arte, me gusta. |
En mi caso constituyo objetos por un lado comprados, regalados, encontrados o heredados, y por otra parte, cosas hechas por mis manos que se amontonan y amasijan para encontrar formas. Lo divino aparece con la coherencia de los objetos, son como mini-collages verticales que son ensamblados dependiendo de el humor, pueden ser de inspiración africana pero algunos contienen materiales milenarios, como el coral, situados junto con piezas producidas por el comercio chino con el fin de ser consumido por las masas occidentales. Una de las razones de mis figuras totémicas y feitiços (denomino así a las piecitas pequeñas) es la de revelar deidades del tiempo mítico y/o contemporáneo, hacen reaparecer ídolos simbólicos, que son ante todo una forma y una cosa; estas figuras son para mí una de las maneras más eficaces para la expresión de la devoción. Este proceso interroga lo sagrado, el tótem y su grado cero, el fetiche. Pero no buscando revelar la figura ya existente sino buscando algo de un orden mágico. Una investigación en torno a la importancia de ciertos mecanismos ocultos de funcionamiento humano. Un trabajo con cuerpos objetuales que podrían tener diverso uso y significado con asociaciones que se realizan desde lugares culturales inconscientes, desde mecanismos de atracción y seducción que se resisten a ser desvelados y permanecen ocultos. Una seducción que no se basa solamente en las manifestaciones visuales o epidérmica del ingenio de la agudeza, sino en la resistencia al desocultamiento que trabajo desde el Arte desde la indagación hacia algo como la conciencia primitiva de la vida. |